Jaqueline Briones
La noche del miércoles, elementos ministeriales realizaron un cateo en la clínica privada ubicada en la calle Hidalgo #2532, colonia Obispado, donde murió Jaqueline Yamileth Briones Torres, de 25 años y originaria de Saltillo, Coahuila, tras someterse a una cirugía estética. De acuerdo con las primeras indagatorias, la joven se sometió a una lipoescultura y durante la intervención sufrió una hemorragia que derivó en su fallecimiento. El médico que encabezó el procedimiento fue identificado como Sergio González. El operativo se llevó a cabo para obtener datos de prueba y verificar si el establecimiento contaba con las condiciones, permisos y licencias necesarias para realizar este tipo de procedimientos, así como para determinar si hubo negligencia médica. Por ahora, se está a la espera de los resultados del cateo. La intervención ocurrió después de que el Colegio de Cirujanos Plásticos, Estéticos y Reconstructivos de Nuevo León informara que los médicos que atendieron a Jaqueline no pertenecen a dicha instancia. En un comunicado, el organismo lamentó el fallecimiento y subrayó que el procedimiento fue realizado por “personas ajenas” a su gremio. También reiteró su compromiso con la seguridad de los pacientes e invitó a verificar credenciales (cédula, certificaciones y aval del consejo de la especialidad) antes de cualquier cirugía estética. Por otro lado, según testimonios cercanos, Jaqueline vendió su automóvil para pagar parte del costo de la cirugía. El resto lo financió a través de una tanda organizada por el programa “Toque Divino”, al que señalan —de acuerdo con denuncias en redes— de participar en la asignación de clínicas para estos procedimientos. Familiares relataron que la joven llevaba meses ahorrando y cumpliendo con sus pagos con la ilusión de someterse a la lipoescultura. Tras conocerse el caso, usuarios en redes sociales exigieron una investigación exhaustiva, cuestionaron la transparencia del programa “Toque Divino” y pidieron revisar a fondo los permisos y el historial del cirujano y de la clínica en la zona del Obispado. La Fiscalía continuará con las diligencias y peritajes para determinar responsabilidades y, en su caso, proceder penalmente contra quienes resulten involucrados.